lunes, 26 de septiembre de 2016

LAS CRÓNICAS DE ELRIC EL EMPERADOR ALBINO 4,5,6,7,8


















Al fin tomé la decisión de terminar con la saga de Elric de Melniboné y ahora mismo siento tristeza y gozo. Tristeza porque no quería que se acabaran las aventuras de Elric y gozo por haber podido disfrutar de Las Crónicas de la Espada Negra y ser conocedor del desenlace. No sé cómo estará considerada la saga por los entendidos, pero creo que es la mejor saga de espada y brujería, sobretodo BRUJERÍA en todo su esplendor; dudo que exista un personaje que encarne la figura del antihéroe mejor que el albino de ojos carmesí.
He disfrutado con cada entrega de la saga, con la rebosante capacidad creativa de Moorcock y su multiverso, de su manera de escribir tan directa. Se podría decir que lo que otro escribiría en mil páginas por su alto contenido y acción, Moorcock lo relataría en escasas doscientas páginas.

No entro a valorar libro por libro ya que prefiero mirar el conjunto de la saga y tampoco quiero hacer spoilers innecesarios, sinceramente llega a un punto en el que me costaría explicar los sucesos de los libros sin enrollarme y liarme como una persiana.
Elric el Emperador Albino es el pilar central de la saga el cual se rodea de pilares más pequeños pero no por ello prescindibles; los compañeros de Elric, que no son pocos y pocas, que lo acompañan en todas sus aventuras: Moonglum, Rackhir, Oone, Ernest Wheldrake, y muchos más que en algún momento comparten el camino con el albino, juntos sortean peligros, desmontan profecías, invocan dioses antiguos y engendros del infierno, viajan a otros planos de existencia y más cosas inimaginables. 

Si hubiera que destacar algún acompañante del Lobo Blanco sería su espada Tormentosa, su insaciable compañera de combate y brujería. Unidos desde la primera entrega de la saga, la espada nutre al hechicero de las almas que succiona sean amigas o enemigas, una espada con voluntad propia y un apego al albino fuera de lo común, juntos , espada y espadachín,  nos depararán como lectores momentos épicos, tristes, repulsivos y un sinfín más de emociones.
¿De qué lado estás? Del Caos y sus Duques del Infierno morfeando hasta la eternidad la realidad que les rodea creando así un caos infinito…. O estás del lado de la Ley con sus perfectos Señores Blancos y su cuadriculado orden de las cosas. Yo sin duda sirvo al Caos como el asesino de mujeres, el lobo blanco, el último emperador de Melniboné, jinete de dragones, príncipe las ruinas, asesino de dioses y un sinfín más de sobrenombres

¡Por Airoco! ¡Tormentosa ven a mí!



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